¿Os acordáis del chiste, queridos amigos/as y clientes? Aquel que dice: “Tengo una noticia buena y otra mala, ¿por cuál queréis que empiece?”
Los mismo nos ha pasado a nosotros esta semana. Empezaremos por la mala: este año la iluminación navideña en Donostia va a ser todavía más pírrica que la de las pasadas Navidades, si cabe. ¿Los motivos? La falta de dinero; no encuentran fondos para cubrir esta partida. Los comercios tampoco estamos para grandes alegrías, por lo que nos centraremos en nuestros escaparates. Es verdad que la ciudad necesita el dinero para lo más prioritario y urgente (como por ejemplo, los servicios sociales) Pero no dejará de ser una pena que en Donostia no parezca que sea Navidad. Esperemos tiempos mejores.
Ahora vamos con las buenas: pronto comenzarán las obras para la remodelación de la estación del tren de Atotxa y de su trazado férreo para convertirla en una que pueda acoger la línea de alta velocidad. ¡Al fin! Es lo que una ciudad pujante como la nuestra se merece desde hace tiempo. Eso supondrá también la creación, al lado de la del tren, de la estación de autobuses, algo reclamado para Donostia desde tiempo inmemorial.
Los mismo nos ha pasado a nosotros esta semana. Empezaremos por la mala: este año la iluminación navideña en Donostia va a ser todavía más pírrica que la de las pasadas Navidades, si cabe. ¿Los motivos? La falta de dinero; no encuentran fondos para cubrir esta partida. Los comercios tampoco estamos para grandes alegrías, por lo que nos centraremos en nuestros escaparates. Es verdad que la ciudad necesita el dinero para lo más prioritario y urgente (como por ejemplo, los servicios sociales) Pero no dejará de ser una pena que en Donostia no parezca que sea Navidad. Esperemos tiempos mejores.
Ahora vamos con las buenas: pronto comenzarán las obras para la remodelación de la estación del tren de Atotxa y de su trazado férreo para convertirla en una que pueda acoger la línea de alta velocidad. ¡Al fin! Es lo que una ciudad pujante como la nuestra se merece desde hace tiempo. Eso supondrá también la creación, al lado de la del tren, de la estación de autobuses, algo reclamado para Donostia desde tiempo inmemorial.
Y más aspectos positivos. Esta semana hemos podido ver en las páginas de los periódicos y en otros medios de comunicación a la Princesa Carolina de Mónaco contemplando la Bahía de la Concha desde la terraza del aquarium. Ha estado en Donostia para asistir al acto simbólico de colocación de la primera piedra de lo que será, en el aquarium, un centro de investigación de túnidos. Después, tras la comida que le ofrecieron en el Hotel María Cristina, comentó que le gustaría visitar la ciudad y recorrer sus calles, pero sin protocolo. Normal, Carolina, ¡cómo no te va a gustar Donostia...!Y es que son muchos los famosos que nos visitan, fuera ya de lo que es el Festival de Cine. Vienen de incógnito (o no tanto) y después nos enteramos que han estado por aquí. ¿Qué es lo que les gusta? La ciudad, su belleza natural, por supuesto; la gastronomía (no son listos ni nada) y… la discreción de la gente, su educación. No les atosigamos, les dejamos ser un ciudadano más y eso les encanta. Acaso nos acercamos con timidez y les pedimos un autógrafo o una foto... Pero nada más.
Por eso han desfilado por aquí últimamente: La Duquesa de Alba, Bruce Springsteen (éste montó en verano en Donostia su cuartel general para su gira por España, no sabe nada “El Boss”) Mónica Beluccci... (dicen que cenó en el Restaurante Bocado)
Pronto volveremos para hablaros del Congreso San Sebastián Gastronomika, algo que no hay que perderse, es a finales de mes. También prontito os anunciamos la campaña de regalos en Perfumería Clásica para Navidad.
Un afectuoso saludo.
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