Como decimos en el título de la entrada, no querríamos hablar de ello, pero tenemos que hacerlo por solidaridad con todos los afectados y, en especial, con nuestros compañeros de profesión: Nos referimos a la inseguridad ciudadana detectada sobre todo en los dos últimos meses.Donostia siempre se ha caracterizado por ser una ciudad tranquila cuyos habitantes afirmaban con orgullo que podían dar una vuelta a las tres de la mañana por la Concha o por cualquier otra zona de la ciudad con total seguridad.
Sin querer sembrar el alarmismo injustificadamente -todavía podemos presumir de ciudad segura si la comparamos con otras del estado- últimamente han tenido lugar varios sucesos que nos dejan a todos preocupados: una violación en la Parte Vieja a una menor, apuñalamiento a dos porteros de una discoteca de la Playa de la Zurriola (un lugar magnífico para tomar una copa, al lado del mar), a un hostelero le roban su recaudación, distintos atracos a ciudadanos y visitantes por la noche, robos en comercios, percepción por parte de los hosteleros y comerciantes de que la Parte Vieja no es segura por la noche...
Estos tristes, lamentables y reprobables incidentes, que condenamos desde nuestro blog, no tienen que volver a repetirse. El Ayuntamiento debe garantizar la seguridad de los ciudadanos y esperamos que pronto se incorporen, como dice el Sr. Alcalde, nuevos agentes de refuerzo de la guardia municipal. Queremos verles en la calle, pues hasta ahora no se les ve, su presencia es escasa. Otro aspecto a tener en cuenta es la sensación de impunidad: delinquen y al poco tiempo están en la calle. ¿Hay que modificar y revisar la ley? ¿Ampara la ley al ciudadano de pro?
Y finalmente, diríamos que deseamos la normalidad, sí, pero también hemos de reflexionar acerca de qué subyace bajo esta ola de delincuencia, qué se esconde tras lo que se manifiesta.
De todos modos, reforzando la seguridad en las zonas más críticas (donde la policía ya se ha dejado ver) el resto de barrios no reviste problema alguno e insistimos en que la ciudad, al margen de este cúmulo de desgraciados sucesos, en general es tranquila y segura como pocas. Pero lo que ha pasado tampoco se puede soslayar: una ola creciente de delincuencia que nos preocupa a todos, y mucho, y esperemos que se ataje. Las autoridades tienen las decisiones, nosotros sólo podemos denunciar lo que pasa y apoyarnos unos a otros.
En este enlace a El Diario Vasco podéis leer un debate sobre la inseguridad ciudadana y las medidas a adoptar entre varios ciudadanos representativos y el Sr. Alcade de Donostia.
¿Cuál es vuestra opinión?
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